Los gatos vomitan por una variedad de razones, algunas de las cuales son normales y otras más graves. Si tu gato vomita con frecuencia, es importante llevarlo al veterinario para descartar cualquier condición médica subyacente.
Causas comunes de vómitos en gatos
Bolas de pelo: Los gatos son muy limpios y se lamen constantemente para mantener su pelaje limpio. Este hábito puede llevar a la ingestión de grandes cantidades de pelo, que pueden acumularse en el estómago y provocar vómitos.
Alimentos o medicamentos nuevos: Si tu gato come un alimento o toma un medicamento nuevo, puede vomitar como reacción. Esto suele ser un efecto secundario temporal que desaparece por sí solo.
Estrés: Los gatos son muy sensibles al estrés y pueden vomitar como resultado de una situación estresante, como un cambio en su entorno, un viaje en coche o una visita al veterinario.
Enfermedades gastrointestinales: Los gatos pueden vomitar como resultado de una serie de enfermedades gastrointestinales, como gastritis, gastroenteritis, pancreatitis y enfermedad inflamatoria intestinal.
Enfermedades metabólicas: Los gatos pueden vomitar como resultado de una serie de enfermedades metabólicas, como diabetes mellitus, enfermedad renal crónica y enfermedad hepática.
Tumores: Los gatos pueden vomitar como resultado de una serie de tumores, como tumores gastrointestinales, tumores renales y tumores hepáticos.
Signos de alarma
Si tu gato vomita con frecuencia o si los vómitos están acompañados de otros síntomas, como diarrea, pérdida de apetito, letargo o decaimiento, es importante llevarlo al veterinario de inmediato. Estos síntomas pueden ser un signo de una condición médica grave que requiere tratamiento.
Cómo tratar a un gato que vomita
Si tu gato vomita con frecuencia, pero no tiene otros síntomas, puedes intentar tratarlo en casa. Aquí tienes algunos consejos:
- Dale a tu gato un ayuno de 12 a 24 horas. Esto ayudará a que su estómago se calme.
- Ofrécele a tu gato agua fresca en todo momento.
- Cuando tu gato esté listo para comer, dale una dieta blanda durante unos días. Puedes darle arroz blanco con pollo cocido o pescado.
- Evita darle a tu gato alimentos grasos, picantes o procesados. Estos alimentos pueden irritar su estómago y empeorar los vómitos.
- Si los vómitos no desaparecen en unos días o si tu gato tiene otros síntomas, llévalo al veterinario.